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La industria catalana aumentó un 4% las emisiones de gases de efecto invernadero en 2017

La industria catalana aumentó un 4% sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en 2017 –con 0,5 millones de toneladas más que el año anterior– seguida de la generación de electricidad, que subió un 3,6% –0,2 millones más– y el transporte, con un 2,5% más de emisiones –0,3 más–, según datos de la Oficina Catalana del Canvi Climàtic (OCCC),

En un comunicado este miércoles, la Conselleria de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat ha vinculado este aumento a la fuerte sequía en el conjunto del Estado, que provocó que los ciclos combinados intensificaran su producción de electricidad para compensar la bajada de producción de la hidroeléctrica.

En total, las emisiones de gases contaminantes totales crecieron un 2% en Cataluña ese año, hasta 45,07 millones de toneladas de CO2 equivalente –N2O, HFCs, PFCs y SF6–, una subida que se mantiene por cuarto año consecutivo y que ha sido de 0,9 millones de toneladas más que en 2016.

Las emisiones han seguido una evolución creciente en Catalunya desde 1990, pero en 2005 hubo un pico histórico de 58,43 millones de toneladas de CO2 equivalente que se mantuvo hasta 2007, cuando la tendencia se invirtió y las emisiones anuales bajaron hasta 2013, cuando volvió a subir.

CEMENTO Y ELECTRICIDAD

El sector industrial y el de los transportes generaron más de la mitad de los gases de efecto invernadero en Catalunya en 2017, con un 31% y un 28% de las emisiones totales, respectivamente, y les sigue el sector energético (15%) y la agricultura y la ganadería (11%)

De hecho, los sectores que están regulados por la Directiva europea de comercio de derechos de emisión aumentaron sus gases contaminantes un 6,2% «por efecto principalmente del incremento en las plantas de producción de cemento, en las instalaciones de producción de electricidad, así como en las instalaciones de cogeneración».

En los sectores que no forman parte de esta directiva, los sectores difusos –edificación, transporte, agricultura, residuos y gases fluorados–, las emisiones se mantuvieron estables, con un descenso del 0,01% respecto a 2016.

Las de transporte han subido un 2,5%, mientras que el sector residencial no ha variado, y han bajado los de la agricultura, los

Las emisiones siguen una tendencia a la baja cuando se comparan con el crecimiento del PIB: «La economía catalana es cada vez más eficiente a la hora de generar riqueza emitiendo menos GEI y, por lo tanto, menos intensa en carbono», ha destacado el departamento.

Las emisiones por PIB se sitúan en Catalunya en 198 gramos de CO2 por euro, por debajo de la media del conjunto del Estado de 290 gramos y las de la Unión Europea, de 288

EMERGENCIA CLIMÁTICA

El Plan de la Energía y el Cambio Climático 2012-2020, hecho en el marco del paquete europeo de energía y clima 2020, establece una reducción del 25% de las emisiones totales en Catalunya en 2020 en relación con las de 2005, que debe lograrse bajando un 15% las emisiones difusas en 2020 respecto a 2005.

En relación a las emisiones totales, en 2017 se redujo un 23% las emisiones en relación a las de 2005, mientras que las totales son de un 16% menos, por lo que la Conselleria considera que Catalunya se encuentra en «el sendero correcto para lograr el cumplimiento de los objetivos» europeos, aunque hará un esfuerzo adicional ante la emergencia climática.

Fuente: Europa Press